La noche del pasado viernes 17 de octubre, miles de chilenxs dieron un grito de rebeldía para frenar años de desigualdad social. La ciudad de Santiago fue escenario del primer foco de fuego que derivó en toque de queda y luego en un estado de sitio, poniendo en evidencia nuevamente que vivimos en un continente marcado por grandes desigualdades sociales, donde los sectores más postergados padecen las consecuencias de un modelo que se sostiene gracias a la enorme brecha con los más poderosos.
En Bolivia se ha consumado un Golpe de Estado eclesiástico-cívico-militar, digitado por la derecha blanca de todo el continente. Al día de hoy en Bolivia está sucediendo la desaparición de personas, la persecución a indígenas, a funcionarios del MAS y de muchas organizaciones sociales. Las fuerzas armadas tomaron las calles, y los medios locales han sido intervenidos, haciendo imposible recibir información de la tragedia que está ocurriendo. Esta situación de profunda violencia y desamparo del pueblo boliviano se da no solo gracias al nefasto accionar del gobierno de Estados Unidos y la derecha boliviana, los grupos económicos, eclesiásticos y militares locales. Este golpe, tristemente, sucede en colaboración con países latinoamericanos, siendo el gobierno argentino uno de ellos.
Por esto, repudiamos la postura del canciller argentino y el presidente Macri que, lejos de colaborar con el apoyo al pueblo boliviano, están siendo cómplices del golpe de Estado.
También repudiamos enfáticamente la represión en Chile, las violaciones a los derechos humanos, los asesinatos que se han desatado en el país vecino. Los militares, aprovechando el toque de queda han violado a varias detenidas, recordándonos las épocas más oscuras del continente. Rechazamos la profunda ola de terror y abusos que el Estado chileno al mando de Sebastián Piñera ha desatado sobre la población civil.
Nos pronunciamos en apoyo al pueblo chileno y al pueblo boliviano: donde cientos de miles de personas están dando un grito de rebeldía frente a años de desigualdad social.
Desde el Colectivo de Cineastas acompañamos al pueblo boliviano en estas horas de represión xenófoba y conservadora, abrazamos a los pueblos que resisten al colonialismo y al neoliberalismo, abrazamos a nuestros compañerxs que están poniendo el cuerpo detrás de las cámaras, a la población que sale a filmar guardando las imágenes que ponen en evidencia la valentía de los pueblos que enfrentan a los cobardes que intentan frenar con balas, tortura y muerte a su propia población para seguir aplicándole las mismas políticas de desigualdad.
Compartimos el contacto de distintos bancos de imágenes conformados para guardar archivo de video y evitar la censura en Chile:
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